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Cantabria adeuda aún 13,5 millones por construir el Puerto de Laredo

Cantabria adeuda aún 13,5 millones por construir el Puerto de Laredo

El Gobierno finalizará los pagos por la infraestructura en 2019 tras abonar las anualidades pendientes

Enrique Munárriz

Viernes, 9 de diciembre 2016, 12:01

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Los mástiles ya se otean en los suntuosos pantalanes del Puerto de Laredo, con más de 130 de atraques ocupados después de casi un lustro en dique seco, una expresión que viene al pelo porque la actividad fue prácticamente nula. Sin embargo, el pago de su construcción todavía le va a costar a la Administración autonómica un dineral hasta 2019. En este periodo, incluyendo el presente año, tiene que devolver no sólo las anualidades pendientes del crédito que solicitó al BBVA para abonar la factura a Ascán, sino todos los intereses devengados. Cada anualidad pendiente le sale a 3,3 millones, merced a un último pago que tiene por la construcción de la lonja, la fábrica de hielo y la urbanización para el funcionamiento de las mismas, que asciende a 622.592 euros.

El Ejecutivo desnudó su cuenta en respuesta a una pregunta parlamentaria del Grupo Popular. El exconsejero de Obras Públicas y actual diputado, Francisco Rodríguez Argüeso, le inquirió por los pagos de la amortización y los intereses de la deuda realizados y futuros. La deuda significa un dineral no ya sólo por su volumen, sino porque no tendrá ningún propósito inmediato. Servirá para devolver el préstamo suscrito para sufragar la edificación de un puerto que no acaba de navegar a la velocidad de crucero que espera la Administración. Una cifra que, además, debilita las ya maltrechas arcas de la Consejería de Obras Públicas y que se completa con los 12,6 millones que se deben pagar antes de final de año sólo por el 'rescate' de la infraestructura después de que la UTE formada por FCC y Ascán entrara en liquidación. El plan inicial del bipartito cuando lo puso en marcha es que a estas alturas en la infraestructura no entrase ni un mástil más. Sin embargo, el estallido de la crisis y el escaso interés del PP, que reprochó en reiteradas ocasiones su construcción y lo mantuvo parado durante su paso por el Ejecutivo durante la pasada legislatura, arrasaron como un tsunami con las expectativas. Tanto que incluso el Puerto de Laredo se llegó a comparar con el aeropuerto fantasma de Castellón.

Hoy ya hay una alternativa para relanzarlo. O eso sostienen con ahínco desde el equipo de José María Mazón. La primera medida ha sido desgajar el puerto como una naranja para intentar sacar rentabilidad a lo que durante un lustro ha sido un agujero negro y que tratar de que funcione. El Club Náutico de Laredo inició el 21 de octubre sus primeros trabajos al frente de parte de la gestión del puerto deportivo, es decir, el varadero, la Marina Seca y los pantalanes para embarcaciones de tránsito. Para llevar a cabo estos trabajos, contará con cinco trabajadores -tres fijos y dos a tiempo parcial-. Ahora son 120 barcos los que gestionan, a la espera de que se trasladen los otros 100 del Club Náutico, previsiblemente para principios del próximo año. Asimismo se ha adjudicado su plan de comunicación para captar nuevos clientes de la costa oriental de Cantabria, la vasca -principalmente Vizcaya- y la costa atlántica francesa.

No es el único charco que queda por sortear. En el Gobierno esperan ya el recurso de FCC y Ascán por la resolución del expediente del contrato. Obras Públicas ha fallado en 12,6 millones mientras que la concesionaria, que era la constructora de la instalación y su explotadora, exige 21,5 millones de euros más en concepto de «responsabilidad patrimonial de la Administración», un paso previo a que el litigio acabe en los tribunales.

Lo que ya funciona es la zona pesquera. Laredo también se ha convertido en una referencia para la flota. Hay días en los que han entrado 80 barcos, algunos vascos y franceses. El hecho de disponer de un parking gratuito de 400 plazas facilita, además, la presencia de los compradores, incluidos los conserveros.

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