Tres mil efectivos se pondrán a prueba en el Besaya ante una inundación catastrófica

Los efectivos proceden de la Unidad Militar de Emergencias, pero también del Ejército, los servicios de emergencias de Cantabria, fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y de países como Estados Unidos y Francia y otros quince que asistirán como observadores.

El máximo responsable de la UME, el teniente general Miguel Alcañiz, ha presentado esta mañana los detalles de este ejercicio al presidente Miguel Ángel Revilla, quien ha agradecido que Cantabria haya sido elegida para un ejercicio que va a "colocar a la comunidad en el foco nacional".

El ejercicio combinado se desarrollará entre el valle de Iguña y la desembocadura del río en Suances, donde se concentran infraestructuras e industrias químicas con las que la UME quiere ensayar cómo hacer frente a un riesgo tecnológico y medioambiental derivado de inundaciones de nivel tres (riesgo nacional).

El día 6, habrá un ejercicio abierto al público, al que está previsto que asistan autoridades.

El teniente general ha explicado que durante esa semana, los efectivos participantes tendrán que hacer frente a situaciones como la caída de un autobús con pasajeros a un río, el desplome de un puente, la caída de torres de comunicaciones o el realojo de familias que han perdido su casa, aunque no sabrán de antemano a qué situaciones se deberán enfrentar.

Alcañiz ha defendido que la prevención, la preparación y la ayuda mutua es "el principio de la solución" y ha afirmado que espera que de este ejercicio salgan "reforzados" todos los participantes.

El presidente ha destacado la valoración que los ciudadanos tienen de la Unidad Militar de Emergencias y su labor en España y en Cantabria, donde intervino ante la última oleada de incendios con una actuación "decisiva" para que la "pesadilla terminara", y en otros países.

"Estamos ante una unidad del Ejército querida por todos los españoles", ha dicho Revilla, quien ha agradecido su labor y la decisión de haber elegido Cantabria para demostrar su eficacia y su capacidad de planificación ante los siniestros.

Este ejercicio, ha añadido el presidente, supone también abrir la UME a la sociedad, lo que, en su opinión, contribuye a reforzar el apoyo de los ciudadanos.