Borrar

La tutela de Génova

La crisis en el PP afecta a su principal mecanismo de oposición, a su primer escaparate político, el Grupo Parlamentario, inmediatamente antes del debate de Presupuestos

Jesús Serrera

Martes, 21 de febrero 2017, 07:09

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Los dos llegaron con el Pleno empezado. María José Sáenz de Buruaga ocupó su lugar como vicepresidenta primera de la Mesa del Parlamento diez minutos después del inicio de la sesión. Faltaban todavía otros cuatro diputados populares. Ignacio Diego llegó dos horas y media más tarde para sentarse en el primer escaño de la bancada del PP. La crisis en el PP afecta a su principal mecanismo de oposición, a su primer escaparate político, el Grupo Parlamentario, inmediatamente antes del debate de Presupuestos y a punto de cumplirse el ecuador de la legislatura, el inicio de la carrera hacia las elecciones de 2019. Desconcentrados de la tarea hace muchos meses y ahora divididos en una batalla de alto voltaje, entre las sonrisas sarcásticas de sus adversarios. Todo lo arreglará la integración, creen en Madrid más que en Cantabria.

Diego y Sáenz de Buruaga fueron convocados ayer por Génova, por segunda vez en 72 horas, para rendir examen a ver si durante el fin de semana han progresado adecuadamente hacia la lista única. No lo parece, pues ahora Martínez Maillo convoca a los notables del partido para que fuercen la unificación. Una integración previa, no a posteriori, en la que la opción ganadora pueda incorporar a lo más valioso del oponente.

La tutela de Génova resulta más bien sonrojante. O sea, que el PP ha pasado de manejar unas primarias puras para sus congresos a introducir una fórmula más conservadora de doble vuelta con los votos sucesivos de militantes y de compromisarios, y termina por imponer desde Madrid la candidatura única de toda la vida.

Las vísperas del congreso de 25 marzo siguen reñidas e inciertas. Diego y su equipo manejan más el balón que hace unos días, antes de que la cúpula nacional del PP se decidiese a intervenir, alarmada por el estruendo en Cantabria. El grupo de Sáenz de Buruaga tiene la ventaja de la candidatura ya presentada para llegar hasta el final, aseguran y mucho trabajo de precampaña adelantado, en tanto que sus adversarios aún no se han animado a hacer lo propio. A Diego a lo mejor le vale con empatar y retirarse si al tiempo se lleva por delante a su número dos. A ver quiénes y cuántos son, y cómo se pronuncian, los notables que convoque Génova.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios