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Lima (izquierda) y Belasteguín, ayer en el Palacio de los Deportes.
"El secreto está en no bajar los brazos"
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"El secreto está en no bajar los brazos"

La mejor pareja del mundo, Fernando Belasteguín-Pablo Lima, se estrena este jueves en el World Padel Tour con el reto de defender su corona

Víctor Puente

Jueves, 30 de marzo 2017, 07:17

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Fernando Belasteguín (Pehuajo, Argentina, 1979) va de rojo y Pablo Lima (Porto Alegre, Brasil, 1986) prefiere el azul. Sin darse cuenta sus camisetas de entrenamiento forman los colores de la camiseta del Fútbol Club Barcelona. No dan patadas a un balón de fútbol pero golpeando a la pelota con la pala de pádel es como ver jugar juntos a Messi y a Neymar. "¡Qué bárbaro!". "¡Jogo bonito!". Expresiones que sonarán como un mantra estos días en el Palacio de los Deportes de Santander cuando el argentino y el brasileño hagan de las suyas para deleite de la afición, pero no tanto de sus rivales.

El Palacio de los Deportes entra en escena con sorpresas

  • El World Padel Tour se estrenó este miércoles con la disputa de algunos de los partidos del cuadro masculino de dieciseisavos de final del Trofeo Año Jubilar Lebaniego. Las féminas jugaron la misma ronda en el pabellón de Soto de la Marina. En ambas categorías hubo más de una sorpresa con la eliminación de alguna pareja top. Este jueves, en La Ballena entran en liza las cuatro parejas cabeza de serie de ambos cuadros.

Debutan este jueves en la pista central de La Ballena a partir de las 20.00 horas, con la vitola de máximos favoritos. ¿Volverán a imponerse al resto o habrá lugar para la sorpresa en el abierto que inaugura una nueva temporada del World Padel Tour? "No aspiramos a igualar ninguna temporada pasada. Sólo buscamos ser una pareja muy dura contra la que jugar". El discurso cholista del partido a partido sale de boca de Lima. No es argentino pero como si lo fuera. Dos años junto al rey del pádel (Belasteguín lleva como número uno del mundo la friolera cifra de 15 años consecutivos) le han servido para algo más que compartir lo más alto de la clasificación del circuito, con 14.640 puntos. "De ganar no nos cansamos porque es una sensación muy buena. Sabemos que es muy difícil pero aspiramos a terminar la temporada otra vez como los mejores".

Mientras Lima habla, Belasteguín asiente con la cabeza y no tarda en saltar para dejar clara la mentalidad competitiva del equipo. "No conozco a ningún deportista que haya tenido la sensación de que se canse de ganar". Y él tampoco. Lleva todo el siglo XXI como el rey del pádel, primer con Juan Martín Díaz como pareja de baile, y desde hace dos, con Pablo Lima. Ahora, con 38 años, sigue fiel a su mentalidad ganadora. "Soy un obsesionado del mejorar y quizás tengo el gran defecto de que no disfruto de todo lo que conseguí en el pasado".

En ese mejorar, mejorar y volver a mejorar desempeña un papel clave su actual compañero. "Pablo es muy competitivo y cuando lo dejé con Juan Martín Díaz nunca dudé en que sería el recambio natural". A la vista de los resultados, no le he ido nada mal. Pero él siempre pide más. "Me permite aspirar a lo más alto y tengo que disfrutar porque no todo el mundo arranca la temporada con unas expectativas tan altas como las nuestras. Ojalá que dure muchas temporadas". Está última frase parece sonar a retirada. "No hay nada que dure para siempre. Lo bueno es que los dos tenemos clara que nuestra filosofía es la de trabajar. El día que no esté a la altura de mi compañero seré respetuoso con él y con este deporte, y lo dejaré". Pero para eso, Belasteguín asegura que "quedan muchos años en los que tenemos que disfrutar al máximo".

La primera oportunidad la tendrán estos días en Santander, donde el cuadro masculino será un todos contra ellos dos. "Se han montado muchas parejas buenas y todas pueden conseguir la primera victoria de la temporada, pero de ahí a temer a alguna pareja, no. El que nos quiera ganar tendrá que jugar mejor que nosotros. Vamos a luchar en todos los partidos y no vamos a dar ningún punto por perdido". La seguridad con la que habla Lima se cimenta en la fórmula de éxito sobre la que gira el dúo. "Nunca bajamos los brazos". Pero Belasteguín añade otra clave más. "Respetamos a todas las parejas, desde la primera hasta la última, y analizamos cada partido como si fuera una final". Otro recurso cholista.

Mayor reconocimiento

Argentinos con brasileños, españoles con portugueses...¿Para cuándo una pareja de ingleses y alemanes? "En España, Argentina y Brasil se ha empezado a jugar antes. Con el tiempo, creo que lo natural es que salgan jugadores de otras nacionalidades. Es cuestión de que el pádel avance en otros países", coincide en vaticinar la pareja argentino-brasileña. ¿Y también es cuestión de tiempo un mayor reconocimiento a un deporte que está creciendo como la espuma? Belasteguín es el que va a por la pregunta y su experiencia habla por sí sola. "Un jugador de pádel de una cierta edad como yo cuando decide dejarlo tiene que ir a trabajar como todo el mundo. A nivel económico, el pádel profesional va creciendo cada vez más pero le queda un montón. Hoy en día, es un deporte semiprofesional porque muchos de los jugadores lo tienen que combinar con dar clases".

El veterano jugador argentino, que anteriormente prefirió echar pelotas fuera cuando se le preguntó por su retirada, ahora arma su opinión personal para hablar del futuro del deporte que domina desde 2002. "Quiero creer y confío en que dentro de cinco años, con la evolución propia que está teniendo el pádel profesional, los jugadores ya no tendrán que dar clases particulares" ¿Y lo de ser conocidos como las estrellas de otros deportes, como el fútbol? Lima mira a su compañero, con la complicidad que muestran en la pista, y remata la jugada. "Ese día llegará cuando tengamos más difusión. Ahora vamos a empezar a salir en la televisión pero nuestra consideración mejorará cuando el pádel tenga un mayor protagonismo en los medios de comunicación".

Clara en el juego pero también fuera de la jaula. La pareja no se anda por las ramas cuando se les pregunta por cualquier cuestión que rodea al pádel, incluidos los tópicos que lo acompañan. Ahí va uno de los más repetidos ¿Es el pádel un deporte para los malos tenistas? "Mentira". La respuesta del número uno es breve pero contundente. Belasteguín cree que el mayor error que cometen los jugadores de pádel es comparar este deporte con el tenis. "El nuestro tiene 30 años y el tenis, una tradición de 150 años". Y por supuesto, su balanza siempre se declina hacia la pala, en vez de hacia la raqueta. "Es el único deporte en el que te puedes divertir desde el primer día".

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